CASTELL DE BELLVER
Si habéis subido alguna vez a este castillo, os habréis quedado impresionados con las maravillosas vistas, ya que podemos observar toda la bahía de Palma. Está claro pues, que su situación es ante todo estratégica. Y que decir de su nombre " Bellver", que significa bellavista. Además de ser el único castillo de planta redonda que se conserva, marcará un hito dentro del gótico catalán.
Pero para conocer bien su historia nos tenemos que remontar al siglo XIV, año 1300, a los inicios de la construcción de este castillo por orden del rey Jaime II, y por el arquitecto Pons Descoll y Pere Salvá. Obras que se alargaron a 30 años. A finales de siglo se utilizó como prisión.
El siglo XVI permitió ver la inoperatividad de las fortalezas. La protección de Portopí no podía mantenerse con estructuras medievales, por ello se construyó el Castillo de San Carlos. Años después, en 1552 se colocaron piezas de artillería. El foso secundario que rodea el castillo fue construido en el siglo XVI, después del ataque de los agermanados.
En 1561 un rayo destruyó la torre opuesta a la torre del homenaje, cerca de la puerta de la reina.
A partir del siglo XVII, y XVII su función llegó a ser exclusivamente usada como prisión. Aquí se encerraron a partidarios de Felipe V, entre ellos Gaspar Melchor de Jovellanos
Son de una gran belleza sus ventanales. Podemos encontrar de diferentes tipos: ventanas geminadas en la planta noble, de medio punto o espitlleras para dispara flechas.
Son varias las leyendas que giran en torno al Castillo y Cuevas de Bellver. Algunas más populares son la Leyenda de la Bruixa Joana o El pit vermell del Ropit.
El castillo durante muchos años tuvo un alcaide que gobernaba con bastante dureza. Se dice que abandonó a su esposa e hija recién nacida. Su mujer intentó entrar en el castillo pero jamás lo consiguió, el alcaide nunca les abrió las puertas. Por tanto madre e hija tuvieron que vivir en el bosque de Bellver. Hasta que un día el alcaide se enamoró de una hermosa doncella y la secuestró (secuestrando así a su propia hija). La madre desesperada pidió ayuda a una anciana, la cual era bruja y le enseñó el arte de la brujería.
El alcaide atacó a la doncella y esta viéndose deshonrada se dejo morir. Un caballero, criatura de la bruja, atravesó con una espada el corazón del alcaide. La madre desesperada vendió su alma al diablo. Desde entonces se la conoce como la Bruixa Joana. Se la visto en forma de sombras o en forma de gato deambulando por el bosque.
Cuentan que el infierno se quedó sin leña y se ordenó a todas las aves que llevaran leña. Así que todas obedecieron sus órdenes, menos el ropit. Como castigo el demonio lo atacó y quedó herido, sangraba en el pecho. A consecuencia de esto Jesús le dijo que conservara esta mancha en el pecho para recordar siempre su enfrentamiento con el demonio. Por eso el ropit tiene el pecho rojo.
Hay otras leyendas en torno al castillo y sus bosques en torno a San Alonso Rodríguez.
Un libro muy recomendado sobre estos temas: MARTÍ I VALERO, Gaspar, "Passejada per les llegendes de Palma", Ajuntament de Palma, 2005.
Imágenes del museo del interior del Castell de Bellver
SALA JOVELLANOS
En el siglo XIX estuvo encarcelado Gaspar Melchor de Jovellanos. Fue sin duda el mejor representante de la Ilustración española. Hombre culto que se caracterizó por los distintos problemas que vivía España. Su espíritu crítico y renovador se plasman en una preocupación constante por reformar las instituciones y costumbres vigentes. Godoy le nombra Ministro de Justicia. Sin embargo las fuerzas reaccionarias opuestas a su espíritu reformador, promueven su cese y lo logran. Se le acusa de hereje entre otras cosas, y en 1801 es detenido y deportado a Mallorca donde es mantenido preso en la cartuja de Valldemosa y en el castillo de Bellver(1808-1811)
SALA DEL TRONO
FUNCIONES DEL CASTILLO
En un principio se diseñó para que tuviera función palatina, aunque tendría doble función: palacio y fortaleza.
La zona de residencia se encontraba en la planta noble o primer piso. Los accesos a esa planta eran a través de una escalera de caracol. En la planta noble residía la familia real y la nobleza. En esta planta también se encuentra la Capilla de San Marc y la cocina. Esta planta está cubierta con bóvedas de crucería ojival de forma trapezoidal. Los capiteles están decorados con follajes estilizados y ventanas geminadas.
En la planta inferior se distribuían las dependencias destinadas al alojamiento de criados y soldados, almacenes y establos, además el Patio de armas era el lugar de entrenamiento de la guardia. El patio forma doble galería con arcadas. Los arcos de la planta baja son de medio punto con pilastras cuadradas idénticas como las del Palacio de la Almudaina. Las oberturas al exterior no son más que pequeñas saeteras, no grandes ventanales como en la planta noble. Conjunto tallado por Pere Despuig. Probablemente inspirado en modelos italianos.
Contaba con 4 torres , la torre principal y otras tres conocidas como torres de flanco.
La torre del Homenaje recibe este nombre porque se colocaba la bandera, convirtiéndola en la torre principal. Es el último de reducto de defensa en caso de ocupación. Contaba con dos puentes levadizos, uno a pie de torre y otro elevado que comunicaba las terrazas. Es una torre cilíndrica de 33 metros que descansa sobre un foso. Bajo la torre se encuentra lo que popularmente se llama olla. Totalmente cerrada sin ventanales, ni oberturas. Una de sus funciones podría ser la de aljibe, puesto que si la torre era el último reducto de defensa, podrían usarse las reservas de agua para resistir.
Pero también será conocida como la cárcel más temida de toda la isla. Sólo se accedía a ella por un pequeño agujero, por el que se lanzaban los presos, por ese mismo agujero se le tiraba comida. Ésta se bajaba con un cubo, si volvía lleno significaba que el preso había fallecido. Se decía que allí se metían a personas que querían hacer desaparecer.
Melchor de Jovellanos afirmó que conoció personas que pasaron por ese sufrimiento. Dentro de las paredes de la torre se han conservado inscripciones y dibujos de aquellos que estuvieron encerrados. Aparte de la torre del homenaje, existía otros sistemas de defensa como las bestorres, que mejoraban el sistema de vigilancia, y los matacanes que probablemente se usaban para tirar arena caliente a su enemigo y éste ya no conseguía entrar.
Había una puerta exterior que comunicaba con el primer recinto por un puente levadizo, un foso que impedía que las máquinas de guerra se acercaran. En este caso no estaban llenas de agua.
Un elemento de defensa que prácticamente ha desaparecido son las almenas que permitían resguardarse y defenderse.
Hay dos accesos al Castillo, la puerta conocida como puerta del Rey y la puerta de la Reina. Así se sabe que las dependencias del rey estarían más cerca de la puerta del rey, como la cocina, y la capilla, y las dependencias de la reina estarían más cerca del otro acceso, como las habitaciones de los niños.
Todos los muros estaban decorados con pinturas de l época por parte de Francesc Cavaller, Mestre Ramon y otros. Solo en la capilla de San Marc se conservan algunos restos de pintura mural del siglo XVI. Un incendio la desfiguró mucho.
si os ha gustado podéis leer el apartado de "Las cuevas del Castell de Bellver"